La paciencia de los seguidores de Future Islands finalmente ha sido recompensada con el tan esperado lanzamiento de su álbum People Who Aren’t There Anymore. Anunciado como un cambio significativo para la banda desde 2023, este proyecto ha generado una expectación palpable durante meses.
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Para dar un mejor contexto, la mayoría de los oyentes casuales identifican a Future Islands por su pegajosa canción «Seasons (Waiting on You)» y otros sencillos que han ido lanzando a lo largo de los años. Su éxito ha trascendido las fronteras estadounidenses, llevándolos a presentarse en diversos territorios, incluyendo México por primera vez en 2018, además de que volverán en marzo del presente año a la Ciudad de México para presentarse en el festival Vive Latino.
El nuevo álbum, que ha sido objeto de especulación y anticipación, representa un paso crucial en la evolución artística de Future Islands. La banda ha dejado claro que este trabajo marca un cambio sustancial en su sonido y enfoque creativo. El sonido característico de la banda, liderada por Samuel T. Herring, experimenta notables transformaciones en este álbum, marcando una evolución crucial en su trayectoria musical. ras cuatro años centrados exclusivamente en covers y colaboraciones, People Who Aren’t There Anymore se presenta como una actualización necesaria, pero inestable entre sus canciones.
El disfrute del contenido del álbum se vio notablemente afectado por un factor clave: casi la mitad de las pistas ya habían sido lanzadas entre 2022 y 2023, lo que generó una sensación agridulce entre lo familiar y lo nuevo durante el estreno oficial del disco.
«King of Sweden», estrenada previamente en 2022, establece un estándar excepcional que evoca emociones intensas y ofrece un viaje auditivo verdaderamente exuberante. Sin embargo, el resto de las canciones del álbum luchan por alcanzar el impacto visceral de esta pista inaugural, quedando en su sombra y sin lograr superarla ni por un ápice.
A lo largo de las 12 pistas, se exploran temas profundos como el duelo por una pérdida, el amor y el anhelo humano de recuperarse de las peores crisis internas. Esta amalgama de mensajes refleja una evolución en la narrativa de la banda, señalando una posible despedida de su pasado, a casi dos décadas después de su formación.
A pesar de la fuerza emocional y la calidad artística presente en cada pista, la falta de cohesión y la inevitable comparación con «King of Sweden» restan impacto al conjunto del álbum. Si bien es un testimonio elocuente del crecimiento y la madurez de Future Islands, queda la sensación de que algunas pistas no logran alcanzar el potencial pleno que se espera de una banda con su talento y legado.
Sin embargo, vale la pena darle oportunidad al álbum para compartir con Future Islands el estándar de su evolución y conectar aún más con los mensajes que brindan con sus poderosas letras y ritmos característicos.
